«Ante la agresión, el Presidente se comunicó con Cristina y un colaborador interesándose por la situación y poniéndose a disposición», afirmó el ministro de Seguridad.
Después de que Andrés Larroque cuestionara al Gobierno por no haber repudiado taxativamente el ataque sufrido por la vicepresidenta Cristina Kirchner en su despacho del Congreso, funcionarios nacionales salieron a responder al referente de La Cámpora.
La primera fue Gabriela Cerruti: “Que nadie dude. El Presidente y todo el Gobierno Nacional desprecia y repudia la violencia”, aseguró la portavoz presidencial mediante publicaciones en redes sociales.
Poco después fue el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, quien cruzó al ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires, a través de un largo hilo publicado en Twitter.
“Querido Cuervo, ‘te aturde el silencio y la parsimonia’ del gobierno ante el ataque a oficinas de Cristina pero ¿sabés una cosa? No es así. Ante la agresión, el Presidente se comunicó con Cristina y un colaborador interesándose por la situación y poniéndose a disposición”, escribió Fernández.
“Después de ello, me llamó a mí instruyéndome para que actuemos con rigor como lo hicimos y sin reprimir, recordando que venimos todos de la misma escuela. ¿Qué pretendo con esto? No dejar palabras sueltas o adjetivos que luego utilicen los profetas del odio”, continúa.
Señando además que “en estos momentos estamos abocados a identificar a los responsables de los desmanes, sabiendo que los piedrazos a la oficina de Cristina, fueron deliberados. Sin duda. Ya está judicializado y estoy convencido que daremos con los responsables y el Presidente está al tanto”.