Fué arrestado por miembros de su propia fuerza de seguridad tras ser acusado de liberar la zona para facilitar el contrabando de granos.
Gendarmes que habitualmente están desplegados en Santiago del Estero fueron los encargados de realizar ayer el allanamiento , en el Escuadrón de Aguaray, uno de los ejes en los operativos antidrogas en la frontera norte. Trascendió de fuentes oficiales que personal de investigaciones de ese escuadrón había participado de la pesquisa ordenada por el fiscal federal Eduardo Villalba.
Según la denuncia, ese comandante principal, un alférez y un sargento estaban involucrados en la ilegal maniobra. Los tres fueron detenidos por orden del juez federal de Orán, Gustavo Montoya. Los gendarmes acusados habrían decidido los lugares de controles viales para permitir el tránsito sin problemas de camiones con granos no declarados que cruzaban hacia Bolivia por el terreno de una finca.
“Gendarmería no admite corrupción en sus filas. A raíz de la denuncia de la propia institución se inició una investigación por parte de la Gendarmería, en la que estarían involucrados tres efectivos de la fuerza y tres civiles”, comentaron en el Edificio Centinela.
La audiencia de imputación se llevará a cabo en la jornada de hoy.Las detenciones; tres gendarmes (uno de ellos jerárquico) y tres civiles; fueron resultado de escuchas telefónicas y seguimientos.
En las últimas semanas se realizaron varios operativos contra el tráfico ilegal de granos a cargo del personal del Escuadrón de Aguaray. El 13 del mes pasado se informó del secuestro de siete camiones que transportaban, cada uno, 30 toneladas de soja, en un embarque que fue valuado en más de 210 millones de pesos.