Este 1 y 2 de noviembre se conmemora el Día de Todos los Santos y Fieles Difuntos. Existen diferencias entre las celebraciones.
Para las provincias del Norte Argentino, mañana martes y el miércoles serán dos días muy importantes y cargados de significado. Muchos suelen confundir el Día de Todos los Santos con el Día de los Fieles Difuntos y hay que tener en cuenta que hay algunas diferencias.
Día de Todos los Santos
El 1 de noviembre se conmemora el Día de Todos los Santos. La Iglesia recuerda a todas las personas anónimas que ya son santos. Además, las familias más creyentes asisten a las iglesias y visitan los cementerios para traer flores y velas a sus seres queridos. Esta celebración inicia en la noche del 31 de octubre, es decir, la víspera de Todos los Santos.
Día de los Fieles Difuntos
En este día se conmemora a todos los fieles difuntos cristianos bautizados que se cree que están en el purgatorio porque murieron con la culpa de pecados menores en sus almas. Se celebra el 2 de noviembre de cada año.
La doctrina católica sostiene que las oraciones de los fieles en la tierra van a ayudar a limpiar esas almas con el fin de adaptarlas a la visión de Dios en el cielo. El día está dedicado a la oración y al recuerdo de esas personas.
Durante el 2 de noviembre se reza alrededor de la mesa de ofrendas. Es un momento para volver a compartir con los familiares que ya no están. Tradicionalmente la mesa de ofrendas y flores para los difuntos se prepara desde el 1 de noviembre.
Cabe resaltar, que es una de las tradiciones más profundas de nuestra región y en el ideario popular las almas llegan de visita este día para reencontrarse con sus seres queridos y las familias los esperan.
Las familias preparan un santuario con comidas, bebidas y velas. Después llega el momento de servir todas las cosas que prepararon: primero a los parientes y amigos que ayudaron, y luego, a los que comienzan a llegar para acompañar a los familiares y amigos.
